Farmacia de Alonso Luengo, en León. Foto de Jordiasturies.

¿QUÉ PUEDES ENCONTRAR EN LA BOTICA?

viernes, 9 de marzo de 2012

Mi discurso para los Oscar

Salgo del armario. No puedo ocultarlo más, y me entrego en sus manos para que me ayuden. Verán: tengo trabajo. Encima, soy profesor en un instituto público con oposición aprobada, lo cual me convierte en funcionario. Sé que en estos tiempos que corren, para algunos, incluidos algunos políticos que supuestamente velan por nuestro bienestar, ésto es motivo de suspicacias y envidia; incluso de oprobio. Pues miren, les pido disculpas...

... O NO, QUÉ NARICES. No entiendo el que el hecho de que tu trabajo vaya superando pruebas y aún exista sea motivo de envidia para nadie. Y tampoco entiendo la repetitiva cantinela que llevo oyendo desde hace tiempo: "da gracias". Como si a uno este trabajo le hubiera tocado en una lotería, o no hubiera hecho los méritos correspondientes para conseguirlo y mantenerlo.

Por supuesto, sé que muchos otros, por desgracia, tienen méritos tan válidos como los míos, o mayores, y no encuentran trabajo, o lo han perdido. Pero que no se engañen ni que les engañen. Igual que lo mío no se debe a la buena suerte, y por ello no veo claro lo de "dar gracias", el infortunio que ha llegado a los desheredados no es cuestión de mala suerte. Es cuestión de mala gestión de nuestros gobernantes y empresarios, y hacía ellos es donde debemos dirigir nuestras iras y exigencias.

Así que miren, no insistan. No pienso "dar gracias" por algo que me he currado y por lo que otros se han sacrificado para que yo consiga. A no ser, claro está, que lo que pasa es que esos que quieren que "dé gracias" quieren que haga mi discursito a lo Oscar, que deje bien claro a quién debo lo que he logrado.

Pues miren, como nunca ganaré un Oscar y no tendré mi minuto de gloria y viaje egocéntrico televisivo ante millones de espectadores, me desfogo, y he aquí mi discurso de agradecimiento por ser lo que soy...

"Señores miembros de la academia humana, gracias por permitirme ser lo que soy, pero siendo justos, muy contadas personas son las que tienen el mérito de mis logros. En primer lugar, gracias a mi familia, mis padres y abuelos especialmente, por los sacrificios económicos que hicieron para darme unos estudios y una formación. Gracias también por su apoyo incondicional en todas mis decisiones, incluídas las que no les gustaron. Gracias especiales a mi hermana y mi tío abuelo, cuyas conversaciones y consejos me han hecho mejor persona.

Gracias a mis profesores en el colegio y en la facultad. A todos, a los buenos y los malos. Los primeros, porque me enseñaron el punto de partida de todo lo que sé y el camino a seguir para continuar formándome. A los otros, porque el ejemplo negativo también cuenta.

Gracias a mis parejas sentimentales, a la de antes y a la de ahora, por aguantarme en los malos momentos, por su cariño y apoyo. Por supuesto, a mi hija, el motor de todo lo que estoy haciendo ahora.

Gracias a mis amigos, los que tengo, los que perdí y los que he recuperado, que siempre estuvieron, y siguen estando ahí, para darme esos momentos de descanso, y también apoyo y consejo, que necesito.

Gracias a mis compañeros de trabajo, que me han dado el entorno ideal para poder llevar a cabo mi labor, y son una ayuda imprescindible. También a mis alumnos, que, a pesar de algún caso puntual que pueda amargar, son la razón de ser de mi profesión y cuyo entusiasmo y ganas y esperanzas por salir adelante son la mejor motivación. Ellos son el futuro.

Para terminar, y no el menos importante, gracias a mí, que soy el que se ha partido los codos estudiando, superando exámenes y pruebas variadas para poder llegar y mantenerme donde estoy.

Finalmente, remedando a Fernando Trueba, si fuera creyente le daría las gracias a Dios... pero como no lo soy, se las doy a Billy Wilder. Y a John Ford, John Huston, Stanley Kubrick, Luis García Berlanga, François Truffaut, Clint Eastwood, Martin Scorsese, Gene Kelly, los hermanos Marx, Charlie Chaplin, Steven Spielberg, Monty Python, Martes y 13, La guerra de las galaxias, Desayuno con diamantes, Dos en la carretera, Star Trek, Cheers, Frasier, Alejandro Dumas, Cervantes, Shakespeare, Tolkien, Raymond Chandler, Conan Doyle, Bob Dylan, Simon & Garfunkel, The Rolling Stones, Bruce Springsteen, Frank Sinatra, The Beatles, The Who, The Jam, Madness, Radio Futura, Antonio Vega, Joan Manuel Serrat, Joaquín Sabina, Javier Krahe, Mozart, Bach, Tchaikovsky, Wagner, Beethoven, Carlos Giménez, Hal Foster, Alex Raymond, Goscinny y Uderzo, Hergé, Franquin, Francisco Ibáñez...

... en resumen, todos los referentes culturales del mundo del cine, la televisión, la música, la literatura y el cómic, aficiones que han hecho de mí lo que soy tanto como la formación académica y el cariño de mis seres queridos".

Hala, ya está, ya he dado gracias. A quien se las merecía, y espero no haberme olvidado de nadie.

A partir de ahora, déjenme en paz con la cantinela, collons... Ni los que me tienen envidia ni los que quieren que me resigne cada vez que me queje.

¡Salud!

No hay comentarios: